De
chiquitos en instrucción cívica nos enseñan que en la democracia
el poder viene del pueblo que elige un gobernante.
De
grandes, algunos aprendemos que el poder no es algo tan simple.
Si
la opinión pública es mayoritaria, es decir si el pueblo todo está
convencido de algo, el gobernante por su propia convicción, por
instinto de preservación, o por pura demagogia, va a actuar en
consecuencia.
(Sobre
la opinión de las mayorías, y
cuándo resultan útiles,
pueden leer esto…
http://algobierno.blogspot.com.ar/2017/09/lo-que-dice-la-mayoria.html
)
Pero,
si las aguas están divididas, entonces el pueblo no funciona como
fuente de poder (que es lo que ocurre casi siempre, muy pocos temas
unen a las masas y en general son los más obvios o aberrantes). De ahí el famoso divide y reinarás...
Entonces,
aparecen grupos que ofrecen apoyo a ciertos candidatos, a cambio de
eventuales favores políticos… aparece la obra pública, las
licitaciones arregladas, las contrataciones directas, la pauta
publicitaria, el mirar para otro lado y todo lo que verdaderamente
hace las bases del poder real y la “democracia” en la que
vivimos.
A los candidatos se los instala con dinero, propaganda,
marketing... y el dinero más fácil de gastar para apostar a un
candidato es el mal habido.
La
segunda fuente de dinero para campañas políticas es el propio
Estado, y es por eso que el que gobierna tiende a sacar más puntos
base. Usando el presupuesto público para apalancar candidatos.
Hasta
ahí, todo bárbaro, porque ya renunciamos a lo ideal y nos bancamos
cierto grado de robo.
Ahora,
estos grupos de poder se dan cuenta de que son ellos quienes
construyen el poder, porque su poca o mucha intervención en suficiente para
desequilibrar o instaurar una falsa mayoría o una myoría por la fuerza. Confiados de que nadie
los persigue o molesta, porque todos participan del mismo juego,
avanzan a la ilegalidad y al afano más evidente.
Quién
los combate?
Nadie.
-
Todos saben que los sindicalistas son ricos gracias a malversar los fondos de las obras sociales y las cuotas sindicales, y que construyen su poder en base a la intimidación y la violencia.
- Todos saben que los intendentes se roban los recursos Municipales y piden ayudas extraordinarias a la Nación y las Provincias.
- También todos saben que varios gobernadores son ricos gracias a vivir en un feudalismo propio de la edad media. (http://www.lanacion.com.ar/2046357-formosa-el-reino-implacable-del-todopoderoso-gildo-insfran )
- También todos conocen -al menos- a un ñoqui estatal, o a un “empresario” que subsiste gracias al Estado. (https://www.clarin.com/politica/afip-habilito-moratoria-cristobal-lopez_0_SJLDcry-W.html )
- Todos saben que con casinos y bingos se lava guita.
- También todos saben donde se vende en negro.
Y…
qué hacemos?
Detienen
a un sindicalista por allí, denuncian a un empresario por acá…
pero:
1)
no condenan a nadie, ni crean las condiciones para que los condenen
rápido, y
2)
no van cortar el problema de raíz ni hacen nada para desactivar ese
sistema mafioso.
Le
dicen falta de apoyo, o base de sustentación...
La
realidad es que No tienen poder para meterse en esos temas, porque se
tienen que meter con los verdaderos constructores del poder político.
La solución es antisistémica... le pedimos a los políticos que dejen de robar dos años... va en contra de sus propios intereses, les pedimos que sean honestos... imposible.
Vidal
en la provincia parece estar haciendo una patriada, una locura,
arriesgando la vida… por no más que gobernar como se espera de
ella. Y es cierto que se la juega… pero no debería ser así. Ahora…
algunos de los que tiene cerca son conocidos mafiosos que podrían
estar desactivando lo ajeno para activar luego lo propio… el tiempo
dirá.
La
única forma para romper el circulo vicioso del poder mafioso, es que
el pueblo retome la unanimidad respecto de ciertos temas, como puede
ser la desviación de fondos públicos (madre y padre de muchos
problemas) y apoye a gente represente esos valores y tenga la convicción y los huevos de llevarlos adelante.
Necesitamos
ciudadanos que piensen, periodistas que pregunten cosas interesantes
para difundir estos temas, políticos honestos y jueces veloces.
Mientras
tengamos todo lo contrario y a la mayoría no le importe… seguirán
rotándose en el poder para robarle el agua al que lo necesita, la
escuela al que quiere aprender y el trabajo al que quiere progresar.
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